Hola. Me llamo Paula. Soy traductora.
Nací en Ramos Mejía, pero toda mi familia es de Montevideo y vivo en Barcelona desde que tenía nueve años y un día. La pregunta «¿de dónde eres?» me causa sudores fríos.
Estudié ciencias puras y me encantaban las mates. Empecé la carrera de biología. Pero estuve en Newbury como aupair y mi jefa me hizo notar un día que repartía mi tiempo entre la biblioteca y el cine. Que quizá lo mío fueran las letras.
Empecé en la TAV en un estudio de subtitulación muy pequeñito. El jefe me dijo el primer día: «A ti te gusta el cine y aún estás a tiempo. Si te dedicas a esto nunca volverás a disfrutar de una peli de la misma manera». Pienso mucho en eso porque tenía más razón que un santo.
Soy muy tímida y muy introvertida. Lo disimulo, he aprendido a hacerlo con los años y doy bastante el pego. Pero sigo teniendo pavor a las reuniones sociales y sigo pasándolo mal cuando soy el centro de atención. A veces digo tonterías o parezco borde porque las interacciones con gente que no conozco o conozco poco me ponen muy nerviosa. Prefiero las distancias cortas.